Al segundo o tercer año de enseñar inglés en empresas en Madrid, me empecé a dar cuenta que me resultaba físicamente agotador ir de un sitio para otro. Soñaba con enseñar en un sólo sitio; o dos como mucho. Pero si quería hacerme con un sueldo algo decente no podía permitírmelo, tenía que ir de un sitio para otro.
Un día, a través de este blog, se me abrió la posibilidad de dar clases por Skype y, poco a poco, empecé a dejar las clases en empresas. Hoy en día puedo escoger lo que quiero hacer. Alguien podría pensar "qué suerte" e incluso envidiarme. Pero pocos imaginan lo que hay detrás de mi actual libertad de opciones. Ahora, cuando analizo mi presente situación y miro hacia atrás me doy cuenta que han sido precisamente esos momentos duros lo que más me han hecho aprender en todo sentido. Pongo ejemplos:
Aprendiendo la técnica
Lo mismo ocurre con la técnica. Resulta relativamente fácil enseñar a alumnos intermediate, upper-intermediate o advanced. Ya tienen la base, ya saben -en mayor o menor medida- por donde ir. Pero un "absolute beginner" está perdido y cuesta motivarlo y ayudarlo a encontrar su camino porque tiene ante sí una montaña de trabajo por hacer. No obstante, el que más te enseña a enseñar no es el alumno avanzado; es el "beginner" que no sabe nada. Es ahí donde un profesor se la juega; donde se pueden ver sus habilidades para motivar y transmitir correctamente la información. Cuando un beginner sale adelante gracias a la ayuda de un profesor es un gran triunfo para él. Cuando fracasa, es casi su fracaso.
Es lo más díficil y, casi siempre, lo que más te enseña.
Digo todo esto porque igual filosofía se puede aplicar al aprendizaje del inglés y a otras materias, así como a muchos otros aspectos de nuestra vida. En absoluto quiero decir con esto que haya que ser masoquista (o quien no se consuela es porque no quiere), no. Más bien se trata de ver qué puedes aprender de las situaciones que te parezcan duras, aburridas o tediosas. Curiosamente, muchas veces lo que aprendes no tiene que ver con el objeto de estudio, sino con otras cualidades que te servirán a lo largo de tu vida o en otras materias de estudio.
Doy ejemplos de lo que puedes aprender del inglés.
1) Constancia: La constancia es más importante que la inteligencia y la memoria; sin constancia es prácticamente imposible aprender nada. Y si en algo se necesita constancia es en el aprendizaje del inglés.
2) Paciencia: "La paciencia es la madre de la ciencia". Y del inglés también, añadiría yo. Tienes que entender que "la paciencia es amarga, pero sus frutos son dulces."
3) Humildad: Nadie puede ser muy arrogante cuando no puede decir más de dos frases seguidas, ¿no?
4) Disciplina: Es la otra cara de la constancia. Sin disciplina no hay quien pueda conseguir objetivos.
5) Organización: ¿Has puesto a prueba tu "time management"? Si tienes que trabajar y estudiar a la vez, te conviertes un experto en gestión del tiempo. Y, ¿a que es útil?
6)Resiliencia: Lo que no te mata te hace más fuerte. Mira aquí.
7) Otros mundos, otras culturas, otra vida: Cuando ya empiezas a dominar el inglés- lo digo siempre- descubres que existen otros mundos por ahí que desconocías hasta entonces.
Cuando escribo este tipo de posts, muchas veces pienso que lo que más me importa no es enseñar inglés a la gente, sino enseñarle a sobrevivir, porque si no sabes sobrevivir ¿de qué te sirve el inglés? |
**********
Novedades:
Roberto Reboredo, nuestro filólogo experto, está coordinando la distribución de preguntas entre voluntarios desde hace dos semanas, además de contestar él mismo muchas de ellas. ¡Muchas gracias por tu trabajo, Roberto!Ebpai clases de inglés por Skype. ¿Dudas sobre las clases compartidas por Skype? Mira aquí. Buscamos para compartir clases de inglés: Si estás interesado en compartir estas clases con estas personas, por favor, sigue estos pasos y no te olvides de poner la referencia indicada en cada clase. Si vives fuera de España, por favor, pon la hora de Madrid. Muchas gracias. |
0 komentar:
Posting Komentar